El B1 para golondrinas mudas

Soy de costumbres, supongo.
Lo mejor de mi casa son los atardeceres, son gratis. Las golondrinas aprovechan la puesta de sol para visitar en grupos numerosos el nido adosado a uno de los vértices de mi casa. Mi madre dice que son los pájaros de Dios, y yo me pregunto, entonces, ¿qué hace Dios poniendo una pajarería en nuestra parcela? Tal vez se deba a que un Hogar requiera de una Familia y, dado que los habitantes humanos que acaparamos estas cuatro paredes trabajamos muy poco en ello, el buen señor decidió que fuera el Hogar de una familia de golondrinas.
Una Familia y bonitos atardeceres, ahora ya parece todo más en su sitio.

¿Sabéis una cosa curiosa de quedarte sola en una casa dónde han cortado la luz y donde acumulasteis los objetos sobrantes de un negocio en ruinas? Que te juntas, casualidades de la vida, con tres relojes de pared que funcionan a pilas -y donde sólo uno está reglamentariamente colgado en la pared-. Escuchas como para cada uno los segundos pasa en momentos diferentes dentro de sus esferas transparentes, consumiendo sus propios instantes. No escuchas el clásico "Tic-Tac", ahora es un "Tic Tic Tac Tic Tac Tac". Suena como si el tiempo se aglomerara por segundo, como si en un segundo se juntaran al menos tres.
Así funciona el mecanismo de mi cabeza: como una casa sin luz, con tres relojes descompasados que funcionan a pilas, un bonito atardecer al día y una familia de golondrinas a la que envidiar todas las tardes. En un pensamiento confluyen tres, entremezclados, así como si mi cabeza fuera China con todos sus chinos hablando su idioma natal.
Imaginad, si el procesador de castellano me funciona regular...en chino es todo un espectáculo. Eso sí, tengo un traductor gráfico chino-español que se me conecta cuando duermo y sueño. Al ser un traductor simbólico onírico y para hacerlo más entretenido, los sueños se me amontonan saciados de representaciones que tengo que descifrar. Es como traducir una canción con el traductor de Google, pero encontrando un sentido.
Si mi vida va demasiado rápido, me sueño conduciendo un coche sin frenos; si tengo miedo, esquivo coches; si estoy más agobiada que Espinete en una cama de velcro, tengo miedo y además tengo la sensación de perder el control de mi vida, entonces sueño que voy en un coche a una velocidad considerable, sin frenos, en una carretera pordiosera de doble sentido, esquivando coches y vigilando que un Todoterreno kamikaze no consiga destrozar una débil valla de madera en su intento de precipitarse al vacío.
Ayer me dijeron que no soy responsable del Todoterreno y que si pretendo seguir mirando, tan sólo conseguiré estrellarme en el camino.
Sé que soy rara y que tengo algún que otro problema con los idiomas. Me he apuntado a una academia para solventar el problema comunicativo y ayer, hablando chino, me dijeron que acabaría entendiendo el mandarín y que saldría de allí soñando en perfecto castellano.

Cuando deje de vivir de prestado no tendré más que un reloj a pilas colgado en la pared del comedor y que me recuerde que en cada "Tic" solo habrá un "Tic", el "Tac" ya vendrá en su momento. No tendré una familia de golondrinas, yo seré una golondrina, sí, de esas que tienen su propio Hogar. El que yo construya, el que yo decida.

No se está tan mal sin luz, sola en casa, sin teléfonos, con un pilot y una hoja en blanco y estos tres relojes que me han recordado que sé escribir castellano en un perfecto mandarín.
¿Para qué necesita una golondrina el B1 de español? Mientras aprendo a comunicarme con los que me rodean aprenderé golondrino, me mudo al nido y me cambio de familia.


Un besito, pajarillos =)

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