Ciclogénesis Explosiva

Ha pasado un mes, el otoño está casi consumido y ha pasado medio desapercibido ante mis ojos. Mi estación favorita ha sido rara..¿dónde se metieron las hojas desparramadas por el suelo?las lluvias nocturnas que nos regalaban suelos mojados camino a clase?. Lo único imperturbable de la temporada ha sido la montaña rusa en la que las temperaturas se columpian a lo largo de las semanas y sin ir más lejos, a lo largo de un mismo día.
Para darme cuenta de esto me tuve que encontrar un lunes en pleno centro a las 9 de mañana (iba a la universidad) repitiendo en mi cabeza el término "ciclogénesis explosiva" cuando un latigazo de viento me vino de frente y me hizo girar la cabeza indignada por cómo me acababa de dejar el flequillo. Ciclogénesis explosiva, mira que son exagerados...pero entonces miré al suelo y vi pequeñas montañas de hojas otoñales amontonadas por el viento a metros de sus respectivos dueños, ahora desnudos. Impresionante, tanto tiempo sin dejarse ver y va y en un momento una supuesta ciclogénesis explosiva destapa al otoño de un soplido.
Y así es como está pasando, rápido, dando guerra en un constante tira y afloja. Ser secundado por Octubre tampoco lo hace muy especial...octubre, el mes de las adaptaciones (y de la feria para otros).

La Operación waka waka sigue su curso, aunque este mes me lo he tirado más de enfermedad en enfermedad que de gimnasio motivador, aun así no he abandonado!. Voy siempre que la universidad, la flojera y el tiempo meteorológico me lo permiten. Sigo encontrándome genial después de salir, de la ducha reconfortante y colocarme mi antiestético (pero calentito) pijama lista para meterme en la cama. Es de los mejores momentos del día.

Paso mucho tiempo con mis amigas, ya lo eran pero ahora más que nunca se han convertido en un pilar fundamental en mi vida del que creo que no podría prescindir, las necesito. Si algo da respuesta al ¿Quién soy? del juego propuesto en clase de psicofarma son en gran parte ellas. Forman parte de lo que soy, y me encanta que sea así.

Mi abuela va a peor progresivamente, se niega a hacer "los deberes" (ejercicios que le mandó la neuróloga para enlentecer el progreso de la enfermedad dentro de la medida de lo posible), ha dejado por voluntad propia de ir a comprar a tiendas que estén a más de unos 300 metros de su casa, ya no solo me bautiza constantemente con el nombre de mi hermana(cosa que no se porqué todo el mundo en mi familia lo hace) si no que tras llamarme con todos los nombres femeninos que pueda conocer opta por preguntarme, en el transcurso de una hora puede preguntarme unas 10 veces por lo mismo, el día de los santos aseguraba que estábamos en diciembre y que era 1990 y algo. Una enfermedad que borra tu vida poco a poco es demasiado cruel.

La universidad no va mal, pero me estoy empezando a medio estresar con todo lo que hay que sacar en febrero. Negarme a seguir con las prácticas de fisio me otorga más tiempo para dedicarme a los trabajos de las asignaturas de cuarto, pero me obliga a aprobar por narices la asignatura completa en febrero si no quiero haber cometido un gran error que me jorobe más de lo normal. Estoy cansada de tanto seminario absurdo y de chorradas varias...copón, existe una cosa que se llama convalidación!!!si esas prácticas las tengo aprobadas y con una media de aproximadamente un 9.5 o así no entiendo porque no se dejan de mariconadas y dejan la tiranía un poquitín ¬¬. La monja malvada es una fuente de estrés importante, aunque ya tengo decidido que no me presentaré al examen en febrero sí que tengo que mojarme con los trabajos de autoformativas y los informes sobre las prácticas...esto sí que me tiene perdida, no se por donde meterle mano xD.

Esta noche me voy de pijama party con mis amigas, genial?no, ¡¡¡lo siguiente!!!. Me hacen feliz :).

Estoy en esa semana del mes en la que las hormonas te vuelven entre medio gilipollas y medio tía profunda, o profundamente gilipollas, ya según como se mire. Echar el curriculum es una genialísima idea, echarlo ahora sería una genialísima idea de profundamente gilipollas. Por lo que controlando mi parte de hormona precursora de ideas gilipollas y haciendo caso a mi lado razonable, me estoy quieta, me centro en mis exámenes, y ya haré el gilipollas laboralmente hablando más adelante. Sí, esa es una decisión inteligente, muy inteligente.

Para terminar, me encanta las sorpresas...y ahora desde el viernes tengo una en mi cuarto casi tan grande como yo, abrazaaable y precioso. Mi oso gigante..*.*

Oh!!!cómo no mencionar el maletín rojo?con mi madre, mis tías, mi prima, y una jauría de mujeres de todas las edades...oh, qué gran aventura meterse en una reunión de maletín rojo sentada al lado de tu madre. Esta aventura se merece otro post, menos soso y más direccionado que este XD.

Iré asomando :)

Comentarios

  1. ¡Hala, ya era hora! Ya te vale, eh, me desapareces así por las buenas, jo...

    Mucho ánimo con lo que tienes por delante a nivel académico y pásalo genial en la fiestecilla pijama.

    Muero por leer el post del maletín rojo, jiji.

    Un abrazo fuerte.

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  2. Una lastima lo d tu yaya: maldita y cruel enfermedad esa... procura prestarla apoyo en todo lo q puedas. Animo con esa semana "hormonal" y no creo q echar curriculim sea idea d gilis... Muchos besos con abrazo d oso (envidioso)

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  3. Qué tal la pijama party? esas fiestas con las amigas son lo mejor que hay, qué sería de mí también sin las mías

    Lo de tu abuela es una pena, pero es así, dsfrutad de los momentos de lucidez

    Besos

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